miércoles, 13 de agosto de 2014

Desde la izquierda

Si alguien me pregunta sobre las razones por las cuales soy zurdo seguramente tendré que remitirlo a wikipedia, que sin duda sabrá explicarle mejor que yo sobre cuestiones técnicas referentes al uso que mi cerebro ha decidido dar a mi cuerpo. 

Si tuviera que contarte  todos los dolores de cabeza que ocasioné a los profesores del sistema publico nacional debido a mi peculiaridad motriz seguramente tendríamos para largo rato. Ahora incluso, recuerdo que cuando estaba aprendiendo a escribir uno de mis maestros casi se infartaba ante mi inhabilidad de agarrar un lápiz como él quería que lo hiciera, y ante su incapacidad de hacerme cambiar de mano. Vaya que soporté un par de reglazos por eso... ahora me da risa, aunque en aquellos días, yo también quedaba al borde del infarto.

Con una de las mujeres que mas amo en mi vida... Gaby :)


A lo largo de mi vida tuve que aceptar que mis profesores no quisieran tomarse mucho tiempo conmigo para no cuestionarse sus propios y ortodoxos métodos de enseñanza. Sin embargo,  como los planes de Dios son misteriosos y llenos de bendiciones, siempre sentí un particular orgullo de que mi cerebro se sintiera más cómodo haciéndome usar el lado izquierdo de mi cuerpo para la mayoría de cosas que involucran algún tipo de movimiento. En casos muy dispersos a lo largo de los años, alguien dejaba escapar un buen comentario acerca de esta peculiaridad mía. 

Pero fue a finales de 2008 que descubrí con certeza la aventura que representaría no ser diestro.

Ahí por noviembre de dicho año entré por primera vez a la Federación Salvadoreña de Esgrima, y al parecer, por primera vez en mi vida era una sensación que alguien como yo fuera zurdo; recuerdo que desde mi llegada todos hablaron sobre lo excelente que sería eso para mí en el deporte. Hasta me sentí un genio de la motricidad en algunos momentos.

A punto de egresar... mis colegas (somos dos zurdos)


Siempre estaré agradecido con todos los maestros que me iniciaron en la esgrima por haber tenido esa paciencia tan determinada a hacerme mejorar, incluso cuando era difícil enseñar a alguien tan zurdo, pero sobre todo tan testarudo como yo.  Por abrir junto a mi el camino del deportista, sobre todo en mi vida, donde eso se veía como un terreno bastante árido. 

Pero sobre todo, por enseñarme a aceptar mis propias diferencias, y por sentar las bases para la formación de un carácter donde aprendí a apreciar con intensidad cada una de mis peculiaridades. 

También estoy agradecido con mi entrenador actual, que a finales de 2009 se tomó la molestia de comenzar a lidiar conmigo (reconozco que lidiar conmigo a veces puede ser una molestia) y de formarme como atleta para dar paso al inicio de mi participación en competencias internacionales. Su profesionalismo sin duda ha potenciado mis habilidades deportivas... y ahí estoy yo, ahora, como parte del equipo nacional de esgrima de El Salvador.

Debo confesar, que muchas veces he escuchado a la gente referirse a mi como "el zurdo" (en la mayoría de casos dentro de mi vida en el deporte), cuestión que aun no termina de agradarme pero que al reflexionar me trae a la mente la idea de que hay gente que presta atención a aquello que me hace diferente y es capaz de identificarme por ello.

Que más da... soy "el zurdo"; y con el sobre nombre o no, me siento orgulloso de que Dios haya decidido poner un chip diferente en mi; un chip que al parecer solo decidió poner en un 15% de la población mundial. Estoy feliz de que El Maestro, haya decidido recordarme cada día de mi vida que se tomó el tiempo de crear una diferencia pequeña que me bendeciría  a lo largo de notables sucesos durante mi estadía en la tierra.

Vaya que valió la pena soportar todos los reglazos que me dieron mis profesores de pequeño, con tal de mantenerme firme a mi necesidad de tomar un lápiz con la mano izquierda. Hoy día, también es con esa mano que tomo el sable cada vez que me subo a una pista a representar a mi país.

Nico, mi carta de hoy no es nada referente al "orgullo zurdo" ni nada por el estilo; sino mas bien, es para traerte a cuenta la importancia que tiene aceptarse y decidir vivir feliz con  cada uno de nuestros pequeños rasgos; porque he descubierto que tienen una razón y que si sabemos dar gracias por nuestras diferencias... Dios nos mostrará el motivo y la bendición que había tras su decisión de ponerlas en nosotros.

Y la carta de este día... gripe y tos de ingredientes esenciales


Antes de despedirme, quiero también traer a cuenta la labor de tu abuela, que siempre se opuso como leona a la intención de algunos de mis maestros de "convertirme" en diestro. Vaya que es una mujer sensata; y yo la amo sin final. 

Desde un par de años atrás.

Te ama
Tu papá zurdo.

Por:
Carlos Eduardo Gómez 
cared1992@gmail.com