En efecto,
«el que quiera amar la vida
y gozar de días felices,
que refrene su lengua de hablar el mal
y sus labios de proferir engaños;
que se aparte del mal y haga el bien;
que busque la paz y la siga.»
1 Pedro 3:10-12
Pareciera que cuando vas a cumplir años siempre te preocupa más lo que tenés para decirle a los demás, que aquello que en efecto tenés para vos mismo.
Sé que te preocupa no tener nada bueno que compartir y que la gente piense que esa vida tan bendecida de la que siempre hablas, no suene tan impresionante como quizás a otros les interesaría escuchar.
Tranquilo Carlos, tranquilo. Estoy seguro que Dios no está esperando precisamente eso.
Creo más bien, que Él espera que podas contar que Su Presencia ha sido constante, tanto en los valles de sombra y muerte, como en los pastos delicados donde Él te ha permitido descansar. Me atrevo a decir con mucha seguridad, que más que esperar tu testimonio sobre las cosas buenas que te acontecen, Él desea escuchar como, con alegría y a viva voz, podes cantar que Su Fidelidad es incomparable.
Cosas grandes, buenas, y maravillosas han pasado en tu vida; nada hay que dudar de eso. Pero ahora, a punto de cumplir 26 años, creo que Su Mensaje para tu vida es claro: "No te canses de contar que Él siempre está ahí"
Jesús está ahí cuando tu vida parece una película de acción con invasión zombie incorporada, pero también esta ahí cuando tu vida parece simplemente la quietud del atardecer.
Él esta ahí cuando parece que vas en una montaña rusa, pero también está ahí cuando vas tranquilo en una bicicleta. Él está siempre ahí.
No importa si estas en lo más alto del podio o simplemente estás sentado tomando un café; Él está ahí. Y eso, simplemente eso, es lo más grande, lo más inimaginado e inmerecido que a la vida del ser humano podría acontecer.
Nunca, nunca, nunca, te canses de contarle a otros que Jesús esta ahí, caminando a tu lado. No te canses de decir que Su Amor supera todo y que Su Misericordia, es lo único que hace falta para que en tu vida haya siempre paz.
Nunca te canses de decir que Su Amor, reflejado en el sacrificio en la cruz, es el mejor regalo que en toda la eternidad alguien pudo hacerte. No te canses de contar que es Su Amor, lo más asombroso que puede pasarte.
Él sigue estando ahí, y no dudo que también se alegra por tu cumpleaños 26.
Felicidades Carlos.
Por:
Carlos Eduardo Gómez
cared1992@gmail.com